La Institución hizo un llamado a revisar sistemas de calefacción e instalación de estos, como una forma de prevenir situaciones que pongan en riesgo a vida a integridad de las personas.
El paulatino descenso de las temperaturas conforme se aproxima la estación invernal, ha incrementado el uso de estufas a leña, parafina o eléctricas, las cuales –en caso de no contar con la debida mantención- pueden derivar en riesgos de ocurrencia de incendios en el hogar.
Al respecto el Carabineros de Chile -a través del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar)- en su rol preventivo y de brindar seguridad a la comunidad dio a conocer diversas medidas orientadas a prevenir siniestros que puedan significar un riesgo para la integridad física de las personas, pudiendo arrasar en pocos minutos con años de trabajo, esfuerzo y dedicación.
Efectuar una revisión periódica y adecuada limpieza de estos sistemas, así como de los ductos de humo o evacuación de gases, es fundamental para prevenir situaciones no deseadas.
Carabineros recomendó de preferencia sustituir la leña por otro tipo de combustible, no obstante, ante la imposibilidad de llevar a cabo tal medida, la leña debe ser de origen legal, certificada y seca, evitando arrojar otro de elementos combustibles.
Al momento de su encendido, evite la utilización de acelerantes como gasolina, parafina, cera u otros elementos que puedan poner en riesgo su seguridad, la de su familia y vecinos.
Labocar recomendó limpiar en forma periódica cocinas y estufas a combustión, verificar la correcta instalación de caños y utilizar un espaciador o aislante, evitando sobrecalentamiento –con riesgo de incendio- en el sector del entretecho o zona de evacuación de humo.
Asimismo Carabineros instó a la comunidad a evitar secar o colgar ropa alrededor del caño de humo, de la cocina o estufa, evitando la caída de estas prendas sobre el artefacto con riesgo de incendio producto de esta práctica.
Calefacción a gas y electricidad
Lo propio ha recomendado la Institución respecto de las estufas a gas, verificando el adecuado funcionamiento del regulador y buen estado de la manguera de conexión, evitando fugas o pérdidas producto del deterioro de los materiales, con riesgo para la salud y la propia seguridad.
Tenga la precaución de instalar este tipo de estufas en habitaciones que cuenten con la debida ventilación, previniendo así intoxicaciones o hechos lamentables producto de la acumulación de monóxido de carbono, ante lo cual no dude en llamar a Carabineros, Bomberos u otro organismo de emergencia.
Respecto de los calefactores eléctricos, chequear su estado de funcionamiento, reemplazarlos en caso que estos presenten daño o deterioro producto del uso, ser precavido y no cubrir el ventilador, junto con evitar sobrecargar enchufes o alargadores, previniendo la ocurrencia de incendios.
Desconecte elementos eléctricos de uso diario después de ser utilizados, tales como planchas de pelo, afeitadoras eléctricas, planchas de ropa, secadoras, entre otras, asimismo cuando dichos elementos estén en uso, apóyelos sobre superficies no inflamables y aisladas de otros elementos combustibles.
Fósforos, velas y cigarrillos
Nunca deje velas encendidas sobre la superficie de muebles o cerca de camas o lugares donde existan elementos combustibles como papeles, libros o ropa, entre otros.
Evite dejar al alcance de niños elementos capaces de producir fuego, tales como fósforos y encendedores.
Si usted fuma, evite arrojar colillas de cigarrillos encendidas a lugares donde existan elementos combustibles como camas, sillones o sectores de acumulación de basura.
Tenga un cuidado único con las personas mayores y niños que vivan en el hogar, el objetivo más básico es el de evitar olvidos y descuidos en la rutina de los quehaceres diarios, junto con explicar a los más pequeños lo que es el fuego y los peligros que conlleva.