La Oficina de Integración Comunitaria recordó a los residentes la necesidad de adoptar los resguardos, proteger los alimentos, desinfectar y ventilar espacios que han permanecido cerrados por un largo tiempo y evitar el contacto con roedores.
Prevenir contagios por virus hanta o un eventual desenlace fatal a raíz de esta causa, es la motivación que llevó al personal de la Oficina de Integración Comunitaria de dotación de la Segunda Comisaría de Puerto Aysén, a enfatizar en los resguardos necesarios con la finalidad de evitar hechos lamentables.
Entre el 15 al 29 de mayo del presente año, se han registrado dos casos por contagio con virus hanta en el sector rural Villa Mañihuales y Puerto Cisnes, ocasión en que uno de los pacientes lamentablemente falleció.
Dicha situación llevó a la Oficina de Integración Comunitaria –entre los días 8 al 19 de junio- a trasladarse a diferentes sectores rurales de Valle Verde, Río Los Palos, Pangal Bajo y Río Álvarez -de la comuna de Aysén- con la finalidad de efectuar una acción comunicacional dirigida a los residentes, recordando las medidas a adoptar, toda vez que se trata de un sector mayormente expuesto a este tipo de contagios.
Carabineros indicó que se trata de un virus que puede ser adquirido al estar en contacto con deposiciones, orina y saliva de roedores silvestres del género oligoryzomys longicaudatus de cola larga, el cual habita zona rurales y sectores próximos a cursos de agua.
Frente a lo anterior, personal de la Oficina de Integración Comunitaria reiteró mantener los alimentos en recipientes bien cerrados, evitar apoyarlos sobre superficies que no reúnan las condiciones sanitarias o higiénicas pertinentes, junto con eliminar los desechos en basureros con tapa, mantener el pasto corto y desmalezar alrededores de la vivienda.
Asimismo, antes de ingresar a una bodega, el personal reiteró que es fundamental ventilar estos espacios por 30 minutos o más, para acto seguido desinfectar con cloro, así como utensilios e implementos de trabajo, sumado a la limpieza de nuestro entorno.
Inicialmente el virus hanta en las personas se presenta como un cuadro gripal, con fiebre, decaimiento, dolores musculares, cefalea y síntomas gastrointestinales. Más tarde se agrega la dificultad respiratoria progresiva asociada a un shock profundo y compromiso cardiaco.
Según estudios realizados, el periodo de incubación fluctúa entre una a tres semanas, pudiendo llegar hasta 45 días.
Actualmente no existe una vacuna ni tratamiento antiviral efectivo, presentando una mortalidad de entre un 30 a un 40%.