Durante las últimas horas, detectives de la Prefectura Provincial Aysén efectuaron dos
procedimientos policiales que culminaron con la detención de dos imputados por los delitos de
apropiación indebida y receptación.
En virtud a una denuncia interpuesta el 28 de julio por el delito de apropiación indebida del eje
de caja reductora de una camioneta y el desarrollo de las primeras diligencias por detectives
de la Brigada de Investigación Criminal (BICRIM) Aysén, instruidas por la Fiscalía Local de la
ciudad, se logró ubicar y entrevistar en calidad de imputado a quien había sido sindicado como
el autor del ilícito por el mismo afectado, reconociendo mantener la especie en su poder.
“Tras efectuar la entrada y registro del domicilio se incautó la especie denunciada, avaluada en
tres millones de pesos, la que posteriormente fue entregada a su dueño. El sujeto fue detenido
por su responsabilidad en el ilícito y posteriormente fue apercibido al artículo 26 del Código
Procesal Penal por instrucción de Fiscalía”, señaló el jefe de la Brigada de Investigación
Criminal Aysén, subprefecto Eduardo Charpentier, quien además agregó que el motivo de la
sustracción de la especie todavía es materia de investigación.
En este caso, “la denuncia oportuna permitió un rápido actuar policial que culminó con la
recuperación de la especie y la devolución a su dueño”, puntualizó el subprefecto Charpentier.
Por otra parte, a partir de diligencias enmarcadas en investigación por el delito de robo en
lugar no habitado, hecho ocurrido en mayo de este año, detectives de la BICRIM Aysén
lograron la recuperación de una de las especies sustraídas, “ubicando el lugar exacto donde se
encontraba, entrevistando a quien la mantenía en su poder y deteniéndolo por el delito
flagrante de receptación”, indicó el jefe de la BICRIM Aysén, subprefecto Eduardo Charpentier,
añadiendo que el sujeto fue apercibido al artículo 26 del Código Procesal Penal, por instrucción
de Fiscalía.
Se trata de un escáner con sus respectivos conectores para automóviles y maquinaria pesada,
avaluado en cuatro millones de pesos, especie que fue entregada a su dueño.
Respecto a este hecho, el subprefecto Charpentier enfatizó que el delito de receptación hace
referencia a una persona que en su poder mantiene una especie que es producto de un delito,
ya sea de robo o de hurto, realizando un llamado a la ciudadanía a comprar en locales
establecidos. “Las personas pueden encontrarse con la sorpresa que un producto ofrecido en
el mercado informal sea producto de un delito. Por lo tanto, la recomendación es comprar en
locales establecidos o bien solicitar boleta, factura o algún tipo de comprobante para acreditar
la procedencia de la especie”.