El equipo ICOVID Chile, iniciativa liderada por la Universidad de Chile, la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Concepción, presentó su informe N° 38 con análisis y datos de las dimensiones propuestas para monitorear la pandemia en el país, con información obtenida hasta el sábado 24 de abril de 2021, proporcionada a través de un convenio con el Ministerio de Salud y el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
En este nuevo reporte se evidencian señales de que la dinámica de contagios a nivel nacional está llegando a su nivel máximo y podría comenzar a disminuir en las próximas semanas. Sin embargo, las cifras siguen a niveles altamente preocupantes que, ante un leve incremento en la transmisión, podrían generar un drástico aumento en los casos activos, llevando a un colapso de la capacidad hospitalaria.
El ingeniero y académico de Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, Marcelo Olivares, explica que en el escenario al que se enfrenta el país a nivel nacional, cualquier brote puede generar un colapso del sistema.
“La pandemia está en su peak a nivel país, el número de casos se mantienen en los niveles más altos desde la pandemia, en todas y en cada una de las regiones, la capacidad hospitalaria está en su mayor nivel de estrés observado hasta la fecha, llegado a saturación total en algunas regiones, aunque existen indicios de que podríamos estar en el pico de esta ola a nivel nacional, los indicadores de carga aún son muy altos en donde cualquier brote puede generar un colapso de sistema, no hay que bajar los brazos y seguir con el máximo cuidado, minimizar contacto, realizar testeos frecuentes y seguir avanzando con la campaña de vacunación, es necesario mantener los esfuerzos en estas dimensiones para recuperar la estabilidad en esta pandemia”, dijo Olivares.
Los niveles de transmisión más elevados se encontraron en los extremos del país de Aysén (1,40), Magallanes (1,26) y Arica y Parinacota (1,27). “Esto indica que, en la mayor parte del país, se mantiene una activa transmisión del virus entre las personas, impidiendo considerar la vuelta a la normalidad en un plazo breve”, advierten expertos y expertas.
Mauricio Lima, investigador en dinámica de poblaciones y académico de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile, plantea que luego del proceso de vacunación, iniciado a comienzos de 2021 y de un mes de medidas restrictivas, “recién se están observando los primeros signos de reducción en la transmisión del virus en la población. Esto es sin dudas positivo, pero nos recuerda lo difícil y duro que ha sido para toda la población contener la dinámica de la epidemia”.
A pesar de que los indicadores de carga muestran una baja en los casos para varias regiones, la utilización de camas UCI sigue en su peak, ya que existe un rezago entre la incidencia de casos y la carga hospitalaria. Es así como la capacidad hospitalaria a nivel nacional sigue con niveles de estrés máximo, con 95% de ocupación de las camas UCI, y de estas 75% ocupadas con pacientes con Covid-19.
La región de Arica y Parinacota experimentó la mayor alza en la utilización de camas UCI por pacientes COVID-19, lo que era esperable dado el fuerte aumento de casos que ha presentado en las últimas semanas. Las regiones de Tarapacá, Valparaíso, Metropolitana, Maule, La Araucanía y Aysén presentan más de 95% de las camas UCI utilizadas, lo que refleja una saturación extrema del sistema de salud. Las regiones de Aysén y Valparaíso tienen sobre 98% o más de utilización, indicando que ya no quedan camas disponibles.