Elisa Loncón, es el nombre de la primera presidenta de la convención constitucional, cuyo trabajo será cambiar la carta fundamental de 1980, instancia que cuenta con representantes de todo el territorio nacional y en el que hay 3 personas electas democráticamente en la región de Aysén.
Geoconda Navarrete, Tomas Laibe y Yarela Gomez, asumieron este trabajo el domingo recién pasado y se comprometieron a trabajar de forma conjunta, pese a sus diferencias de opinión, para avanzar hacia mayor descentralización desde esta misma instancia.
“Realmente empieza a funcionar la convención, logramos avanzar y cumplir el objetivo de envestirnos en los cargos en propiedad, de poder elegir presidenta y vicepresidente quienes tendrán que dirigir el accionar de lo que será nuestro trabajo, ya inmediatamente se fijaron sesiones para el día de hoy y los siguientes días de la semana que nos van a permitir sobre todo, abordar en lo más importante lo que es trabajar rápidamente en un reglamento que como todo sabemos, es el punta pie inicial para poder darnos la regla del juego respecto a cómo vamos a funcionar”, dijo Navarrete.
En tanto, Tomás Laibe, quien marchó desde Plaza Dignidad hasta el Palacio Pereira, junto con explicar lo emotivo de la constitución de la convención, relató cómo fue el momento de tensión cuando se dio aviso de la fuerte represión que se estaba viviendo en el exterior.
“Estamos muy contentos, con el corazón lleno y con mucha satisfacción, hoy día tuvimos una jornada muy larga, pero histórica que terminó al final con una convención constitucional constituida, presidida por una mujer Mapuche, así que estamos listos para cambiar el rumbo de la historia de Chile. La verdad fue algo que habíamos discutido los días anteriores, que iba a pasar si el día de la constitución de la convención había movilizaciones convocadas, sabíamos que eso iba a ocurrir, que iba a pasar si había represión por parte de la fuerza policial y si dentro de la convención nosotros reunidos había afuera gente siendo reprimida y lo que nosotros decíamos es que no podíamos partir este proceso con represión a las puertas del Congreso”, señaló Laibe.
“Es precisamente esa represión a lo que nos lleva a este proceso constituyente, entonces cuando empezó a ocurrir o empezamos a recibir comunicaciones desde el exterior que estaban siendo reprimidas las movilizaciones en varios puntos de la capital y con varias personas heridas por bombas lacrimógenas obviamente se generó una tención muy grande dentro de la convención”, agregó el constituyente.
Si bien, de momento no hemos podido conversar con Yarela Gomez, quien también asumió el rol de convencional constituyente, manifestó a través de sus redes sociales la alegría del apoyo de la ciudadanía y también criticó la fuerte represión policial que se vivió en Santiago.
“Comenzamos el día con la caravana cultural del Frente Alto, recorriendo las calles de Santiago muy temprano, allí recibimos el cariño de muchas vecinas y vecinos que confían en el proceso y que esperan que estemos a la altura de los desafíos, así lo entendemos y trabajaremos por ello, el punto negro del día fue la represión que acompaño el inicio de la ceremonia inaugural, no podíamos tolerar que reprimieran a quienes estuvieran en su derecho de estar allí, en tanto este proceso es expresión de los movimientos sociales y de los cientos de miles de personas que llevan muchos años marchando y manifestando la necesidad de transformaciones profundas en el país, pese a ello el pueblo logro instalar la convención y logramos elegir a quienes ocuparon los cargos de presidencia y vicepresidencia, aspiramos que estos cargos sean paritarios, descentralizados, plurinacionales y rotativos”, comentó Gómez.
Cabe destacar que ya se definió por parte de la Presidenta Elisa Loncón, que uno de los primeros temas a tratar al interior de la convención constitucional, debe ser el indulto a los presos políticos de la revuelta y la forma en que actuarán y presionarán al ejecutivo y legislativo, para que se avance en las causas que están pendientes y que mantienen en prisión preventiva a muchos y muchas que fueron parte del estallido social.
Esta jornada la sesión debió ser suspendida, ya que en la infraestructura no se podía respetar la distancia social entre cada uno de los convencionales constituyentes y además habían problemas técnicos con los micrófonos.