El alza del precio del combustible genera estragos en nuestro país, especialmente en la región de Aysén, en donde las bencinas superaron hace días los 1000 pesos por litro, costos que preocupan a la Federación de Transportes Público.

El gremio solicitó que se les dé un trato diferenciado como en Magallanes, de hecho proponen generar un mecanismo entre ambas regiones para disminuir considerablemente el precio de los combustibles. 

“Ojalá a la región de Aysén también se le dé el beneficio que se le entregó a Punta Arenas, que fue congelar los precios de los combustibles”, dijo Luis Oyarzún, presidente de la Federación de transporte público menor Coyhaique.

El aumento de precios que ha experimentado nuestro país en las últimas semanas ha impactado los bolsillos de las familias y en el caso de los taxistas han disminuido sus ingresos por este hecho.

“Esto nos perjudica y por ello es que nosotros pedimos una solución para esta región como zona aislada, de hecho está reconocido desde el año 2012, que trabajar en el transporte público en esta región es distinto al resto del país”, manifestó Oyarzún.

Desde la Federación de Transporte Público menor, no descartan una nueva alza en el precio del pasaje de taxis y colectivos, para marzo del 2022.

“Llegamos a una conclusión, si se sube el transporte público se perjudica en este caso a la gente más necesitada, nosotros trabajamos con personas que trabaja con un sueldo o un salario mínimo, entonces subir la tarifa en este minuto y saliendo una pandemia, es bastante complejo; quedamos que en marzo se iba a hacer un análisis con los detalles más concretos, allí se supone que estamos un poco más en la normalidad y debería empezarse a mover más la economía regional”, agregó Oyarzún.

Los dirigentes buscarán apoyo parlamentario y gubernamental para congelar los precios de los combustibles en la región de Aysén.