La mañana de este viernes unos 60 funcionarios y académicos de la universidad de Aysén hicieron efectiva una marcha en señal de protesta ante la determinación de la nueva administración de la casa de estudios de desvincular a un número todavía no cuantificado de funcionarios y académicos el próximo jueves 30 de noviembre.
Desde la Asociación que rige a los académicos y funcionarios, dieron más luces del porqué optaron por abandonar la mesa de trabajo, señalando además que hasta el día de hoy no tienen ningún antecedente de los criterios a establecer para ejecutar el inevitable proceso de desvinculación.
Jeanette Soto / presidenta Asociación de Funcionarios y Académicos
Las palabras de Soto fueron apoyadas por más dirigentes de la AFUA de la institución educacional, quienes también recibieron el apoyo de la CUT, quienes cuestionaron un eventual nepotismo al interior de la casa de estudios que hoy dirige el rector Enrique Urra.
Edith Escobar / dirigente Asociación de Funcionarios y Académicos y Mauricio Muñoz Gatica / dirigente CUT Coyhaique
La situación crítica actual también fue comentada por alumnos de la U. Aysén, quienes no escondieron los problemas que ha acarreado la crisis financiera e institucional, señalando que se han visto perjudicados en el cumplimiento de sus clases ante la incertidumbre.
Natalia Llancán / estudiante de trabajo social
En paralelo, y durante la misma mañana, La Superintendencia de Educación Superior (SES) comunica que, en el día de hoy, ha entregado a la Universidad de Aysén un completo informe que da cuenta de los hallazgos producidos a propósito de la investigación realizada para determinar el actual estado financiero de la institución y sus proyecciones.
En el mismo comunicado, la Superintendencia de Educación Superior dijo que “confía en que la Universidad de Aysén analizará estos hallazgos en sus principales instancias de toma de decisión y adoptará las medidas que sean necesarias para asegurar la continuidad de su proyecto institucional, orientado al desarrollo de la región de Aysén y de su gente”.
Cabe consignar que la Ley 20.800 establece tres caminos futuros en el horizonte institucional de la U. Aysén, el cual puede conllevar el llevar adelante un plan de recuperación, la asignación de un administrador provisional o un administrador de cierre, sin duda el peor de todos y el que nadie espera.