En dependencias de la capilla Juan y Pablo el padre obispo Luis Infanti, junto a sacerdotes y diáconos de toda la región, oraron y meditaron en el tradicional retiro espiritual anual del presbiterio de la Iglesia de Aysén; este año 2024 guiados por el sacerdote diocesano Rodrigo Magaña de la zona Maipo de Santiago.
Cada año, durante una semana, la Iglesia de Aysén ofrece esta instancia de animación espiritual a sus sacerdotes y diáconos para revitalizar el servicio, y atención pastoral, que despliegan durante todo el año en las 60 comunidades católicas de la región.
El diácono de la parroquia de Chile Chico, Carlos Vergara, destacó este encuentro fraterno sobre todo en este tiempo Pascual en que la resurrección de Jesús alimenta e ilumina la esperanza para el pueblo de Dios en la Patagonia aysenina.
Carlos Vergara – Diácono de la parroquia de Chile Chico
Quien también desarrolló una activa participación en esta instancia de renovación espiritual fue el vicario pastoral de la Iglesia de Aysén, el padre César Leiva, que además de agradecer el encuentro que los convoca desde diversas localidades de la región, subrayó la profundidad de los contenidos orados y meditados con el padre Rodrigo Magaña.
Padre César Leiva – Vicario Pastoral
El padre Rodrigo Magaña, quien sirve pastoralmente en la parroquia Nuestra Señora de Monserrat, comuna de Puente Alto en la zona Maipo de Santiago, animó este retiro espiritual 2024. Él resumió brevemente lo profundizado en esta semana de oración y meditación.
Padre Rodrigo Magaña – sacerdote diocesano
Tras la eucaristía y el almuerzo final de este retiro espiritual anual el presbiterio del Vicariato Apostólico de Aysén todos los presentes —obispo, sacerdotes y diáconos—, agradecieron la instancia y se dirigieron a sus respectivos espacios pastorales animados por la fraternidad y el encuentro con el Resucitado que anima su servicio y ministerio en la Patagonia aysenina.
