El año 2019, bajo la segunda administración del Presidente Sebastián Piñera, se firmó el convenio de programación entre el Ministerio de Salud y el Gobierno Regional de Aysén, el que involucraba una inversión conjunta de $62 mil millones para llevar adelante 28 iniciativas.
A cinco años de aquello el panorama no es del todo alentador, más si desde el mismo Gobierno Regional se reconoció que la firma del exministro Emilio Santelices y la exintendente Geoconda Navarrete hoy es una simple declaración de buenas intenciones.
Teresita Fuentes / Jefa División Presupuesto e Inversiones GORE Aysén
Lo anterior, debía realizarse entre los años 2019 y 2024, y que según antecedentes aportados desde el Gobierno Regional de Aysén, al día de hoy tiene un exiguo porcentaje de avance de un 13,8%, a razón de un gasto de $8.465 millones, y donde el 93% ha sido asignado desde calle Ejército #405.
Teresita Fuentes / Jefa División Presupuesto e Inversiones
Dentro de los proyectos que no presentan ningún tipo de avance está la posta de salud rural del sector El Gato, iniciativa que hoy no tiene un futuro claro por falta de un terreno para su edificación.
Teresita Fuentes / Jefa División Presupuesto e Inversiones GORE Aysén
Eso sí, desde el mismo Gore se planteó que igualmente se está trabajando por consolidar un convenio de programación que pueda dar cuenta de las necesidades obvias en materia de salud; aunque desde el mismo consejo se mostró su preocupación por sentirse a la deriva.
Teresita Fuentes / Jefa División Presupuesto e Inversiones GORE Aysén
Lilian Inostroza / Consejera Provincia General Carrera
Entre los antecedentes expuestos en la comisión de Desarrollo Social, Cultural y Deportivo, también se dio cuenta de proyectos que tienen un cero por ciento de avance como la normalización del CESFAM Alejandro Gutiérrez, la reposición del CECOSF de Aysén, la reposición de la Posta de Salud Rural de Puyuhuapi, entre otros proyectos que apuntaban a mejorar la infraestructura de la red asistencial regional, algo que por ahora deberá esperar, en perjuicio de las comunidades.